Desde la diversidad

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A lo largo de los 18 meses que las 33 x Oscar han estado en el Puente, se les han unido diferentes grupos de mujeres, entre ellas, trabajadoras de la cultura, abogadas, maestras, trabajadoras sociales, psicólogas, abuelas, mujeres del sector religioso, periodistas y funcionarias gubernamentales.

En esta ocasión, nos reunimos un grupo de lesbianas, que llegamos aquí con la etiqueta.

Como bien sabemos, nosotras “estamos en todas partes” y hemos estado en cada uno de esos grupos. Sin embargo, en esta ocasión queremos participar abiertamente como un sector de la sociedad que conoce el discrimen y la injusticia de primera mano, que sabemos también de la importancia de la solidaridad y la sororidad.

A veces somos invisibles. Parece que no, pero estamos.

Tenemos diferentes oficios y profesiones, y un gran grupo está desempleada; tenemos diferentes niveles socioeconómicos y educativos, ideologías y creencias. De alguna manera, la comunidad lésbica representa muchas de esas identidades que compone lo diverso, y como grupo queremos hacernos visibles y llevar un mensaje desde la diversidad por la excarcelación de Oscar López Rivera.

¡33 años son demasiados!

Desde la diversidad, así como es el reclamo nacional e internacional; voces distintas que dicen que ya es hora de traerlo a casa, para que vea el mar, para que disfrute con su hija y familia, para que cada una de nosotras siga aprendiendo de su tesón, claridad y fortaleza.

En este grupo no convoca una organización en particular. Nos convocamos. Como hemos hecho a través de los años.

Existen grupos lésbicos de los que algunas integrantes están aquí, como Taller Lésbico Creativo y Las Libertinas (grupo cerrado de lesbianas, mayores de 50 años). En éstos y otros grupos que han existido en nuestro país, creamos espacios para desarrollar el trabajo a partir de nuestras necesidades y experiencias. Entre éstos, cuya labor fue (y sigue siendo) de gran impacto mencionamos a Madres Lesbianas, Nosotras 10/ Aquelarre Lésbico, Taller Zuania, Colectivo de Lesbianas Feministas.

En este momento es fundamental que todos los sectores de nuestra sociedad estemos presentes y en solidaridad con esta lucha por la excarcelación de Oscar.

El triángulo rosa invertido que usamos hoy, se utiliza por las comunidades lésbica, gay, bisexual, transgénero y transexual (lgbtt) desde el 1970.

Es un símbolo de la represión, con él se distinguían en los campos de concentración nazis, a los hombres homosexuales y a las mujeres transexuales a las que no se les reconocía su naturaleza de mujer.

Las mujeres lesbianas eran marcadas con un triángulo negro invertido.

La idea de rescatar y utilizar el triángulo rosa fue recordar lo ocurrido en la guerra y reforzar la lucha en contra de la discriminación y la homofobia a través de este símbolo.

Cerca de 220,000 gays y lesbianas murieron junto a los millones de judíos que los nazis exterminaron.

El pasado viernes 26 de septiembre, se aprobó una resolución en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, contra la violencia y discriminación por orientación sexual o identidad de género. La resolución presentada por Brasil, Chile, Colombia y Uruguay contó con 25 votos a favor, 14 en contra y 7 abstenciones.

Esta resolución es importante por muchas razones, entre ellas, porque invita a cuestionar, reflexionar y dejar de repetir a ciegas el discurso de cómo América Latina es de las regiones más conservadoras en estos temas.

También, porque como el triángulo rosa, sirve de recordatorio de las fobias que fomentan el odio y se interponen en el camino de la equidad.

Estados Unidos fue uno de los votos a favor de esta resolución, incluso consumieron un turno con un breve pero contundente mensaje por los derechos humanos para todas y todos.

Y nos preguntamos, ¿cómo ese mismo gobierno que alardea de tener como prioridad la igualdad y la justicia en todas partes del mundo, mantiene en sus cárceles a un prisionero político puertorriqueño como Oscar López? ¿Podemos aplaudir tranquilamente esas contradicciones?

Desde aquí, algunas de nosotras nos comprometemos en desarrollar desde nuestro trabajo por la justicia, una cadena de información y solidaridad hacia y desde grupos lésbicos y de las comunidades lgbtt en y fuera de Puerto Rico. Deseamos darle vuelo a los esfuerzos que se han estado haciendo y unirnos a las campañas desde la diversidad.

En una ocasión, exponiendo sobre la equidad y la justicia, compartí estas palabras que tienen relevancia en este caso y en esta causa.

Desde aquí hacemos:

Un llamado a la VOLUNTAD,
un llamado al COMPROMISO,
un llamado a la SOLIDARIDAD,
un llamado a RECONOCER que las luchas por la JUSTICIA SOCIAL son transversales, horizontales.

Un llamado a ACTUAR respondiendo a esa realidad.

Un llamado a REFLEXIONAR en:

Que el empeño por la justicia no puede limitarse a UNA CONSCIENCIA. Que la verdadera consciencia tiene manifestaciones múltiples y emprende caminos diversos.

Que en la medida en que éstas y éstos se encuentran son más concretas y efectivas nuestras oportunidades.

Éste es un LLAMADO…

PORQUE LA VOLUNTAD, LA SOLIDARIDAD Y EL EMPEÑO TIENEN URGENCIA.
Porque el regreso de Oscar a casa, tiene urgencia.
¡Oscar nos reúne, en nuestra diversidad! ¡Oscar pide equidad y nosotras libertad!
¡Lesbianas presentes; en las luchas, en los frentes! 

Articulo originalmente publicado en Claridad.

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